Cosas de mujeres, asuntos de nosotras

Hace meses que estoy en el conocimiento del yo interno, hace meses que me evalúo buscando las posibilidades de cambiar mi vida un poco. Quererme yo, yo y yo.

No se hasta que punto lo hago bien porque me encanta estar sola. Ir al cine sin nadie es para mi un placer supremo, quedarme en mi casa viendo TV, o salir a ver tiendas con la simple compañía de mis pensamientos es algo común en mi. También me gusta mucho estar con mis hijas, pasar tiempo con ellas, dedicarles tiempo, crear recuerdos, buscar aventuras. En conclusión, temo no estar disponible para mas nada.

Busco entre mis neuronas sexuales el tipo de hombre que me gustaría tener y lleno mi lista de requisitos casi imposibles, busco entre las faltas de ortografía de sus textos, el pelo, la voz, las piernas, en fin, defectos tras defectos.

Pero hay algo peor!!!! busco entre mis neuronas sexuales los hombres que me gustan y todos tienen un factor común, son casados. Hasta el momento con ninguno he cruzado mas que un par de palabras o saludos y, EN PRINCIPIO, no pasará de ahí. Son Hombres ajenos.

Lo cierto y real de todo esto es que mis pensamientos demuestran que no estoy disponible todavía, no he curado, no soy tan tolerante, no me he enamorado. Tengo un boicot a mi vida sentimental y pongo los pies en polvorosa cuando siento que alguien quiere derribar mis barreras. Es malo o es bueno?, sigo en el mismo lugar de años atrás? No se, pero al parecer no quiero averiguarlo, en esta etapa de mi vida los hombres son puros y simples instrumentos sexuales, no quisiera que fuera asi mas lo es. No quiero verlos como un pene ambulante pero hace tiempo que es así de simple.

Sin mas que decir, mejor no digo nada.